Este blog ha sido creado para fortalecer y difundir las ideas que conforman el proyecto nacional, popular y democrático.

lunes, 20 de febrero de 2012

Piel de oveja. Por Luis Bruschtein

En noviembre del año pasado, Página/12 publicó la denuncia sobre las presuntas actividades de espionaje que habría realizado Gendarmería. Los demás medios prácticamente no le dieron importancia al tema. Ahora Clarín, La Nación, TN y Radio Mitre lo han convertido repentinamente en un best seller. Página/12 viene publicando artículos sobre las protestas contra la minera de Bajo La Alumbrera desde principios del año 2000 sin que ninguno de los grandes medios le llevara el apunte al tema. Ahora, los grandes medios se han convertido en los campeones del ambientalismo. Los grandes medios apoyaron la guerra de Malvinas durante la dictadura y ahora se han convertido en críticos de la estrategia diplomática y pacífica del kirchnerismo. Corriéndolo por izquierda, son tan pacifistas que, para varios de sus columnistas, la “dialéctica verbal” es equivalente a la “dialéctica de las armas”, porque “la violencia de las palabras” llevaría en su seno la violencia en general.
Los grandes medios reclaman una lectura ingenua de la realidad; los periodistas que se proclaman independientes se irritan cuando el público deja de ser ingenuo y se propone una lectura política de lo que ellos escriben. No quieren que su independencia sea puesta en tela de juicio y por lo tanto reclaman esa “ingenuidad” a sus lectores, lo que implica, además, que les cedan a ellos toda la inteligencia. Es como si dijeran: “el que necesita ser inteligente soy yo, no vos, porque el actor de esta película soy yo y vos sos pasivo y consumidor, porque sos espectador”. La mirada ingenua que reclaman es lo mismo que pedir un cheque en blanco. Nadie tiene ese derecho. Pero ellos la reclaman porque esa mirada ingenua es la única que puede tolerar, por ejemplo, esos cambios tan drásticos de las líneas editoriales sin que les generen alguna duda.
CONTINÚA: http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-187850-2012-02-18.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario